20200112

una vez quise entrenar una de las cotorras que tenía mi vieja en una jaula, abrí la puerta salió volando y en el aire la cazó la gata que saltó desde abajo de unos helechos, la recuperé y se voló hasta un árbol altísimo desde donde nos gritó bastante.

hace poco le conté a un chico en su patio y con ocho perros alrededor que una vez hice callar a todos los perros del pueblo con un aullido desde la terraza.
pensó que lo estaba jodiendo pero no, estaba diciendo la verdad. es fácil que el otro te crea cuando decís la verdad. Pero también es posible que haga falta un gesto extra, único, irrepetible y espontáneo para que el otro confíe de inmediato.
dicen que los buenos mentirosos son aquellos que creen lo que dicen, es por eso que muchos mentirosos son también psicópatas.
siempre me preocupó que no puedo darme cuenta de cuando alguien miente, a menos que haya más evidencia. mi instinto nunca dice ¡cuidado, está mintiendo! ¿existirán las personas que de toque se dan cuenta cuando les mienten?
de todas maneras, parece ser necesario mentir. mentirle al policía, mentirle a tus padres, a tu novio, a tu jefe, a vos misme.

cuando le aullé a los perros estaba con una amiga tomando cerveza, los perros no paraban de ladrar y se me ocurrió que yo también podía ladrar y nadie se iba a dar cuenta que era yo.

bailar es una de las pocas cosas que le da sentido a mi vida, a mi cuerpo, a mi corazón, mi taquicardia, mi falta de aire, mi ser sin culpa.
cantar no es algo que se me de, algunos me han dicho que desafino, otros que pego muy bien las notas. así que, ¿quién sabe?
el chiste es que bailar tampoco se me da, nunca tuve un aquello que perder. no hay comparsa ni ballet ni compañía ni pareja ni plata. vivo de bailes pasados, vivo de pistas y rodas increíbles, vivo de coreografías aprendidas, vivo de videos, vivo de la memoria muscular.
caminar detrás de tambores, caminar delante de tambores, caminar junto a los tambores.
asisto a todas las fiestas que puedo, son pocas. y cuando tocan voy y bailo pero cada vez nos conocemos más todes y ya no me gusta tanto.
y el rollo es un momento correr por la arena y bailar, subir la cuesta y bailar, escuchar música y bailar, nadar y bailar, estirar y bailar.


hoy bailé una cuesta abajo y canté dos cuesta arriba y una cuesta abajo.

1 comentario:

Flor dijo...

Gracias marin, nunca dejes de escribir, por favor.